“Otros mundos”. Fotoproyecto desde el cementerio de autos fusilados

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Hace ya más de un año que se está librando la guerra a gran escala, y los ucranianos viven o presencian acontecimientos históricos casi a diario. Cada uno de nosotros trata de comprenderlos, pero aun después de varios meses o incluso un año, sigue siendo difícil entender todo lo que ha ocurrido. Sin embargo, buscando respuestas, fortalecemos nuestro carácter, nuestra resistencia y, finalmente, cristalizamos nuestros valores.

Uno de los intentos de lograr ese entendimiento es el proyecto fotográfico de Petro Chekal, un voluntario de Ukraїner, fotografiado en agosto de 2022 en el cementerio de autos fusilados en Bucha. Hace un año, los acontecimientos en esta pequeña ciudad cerca de Kyiv se convirtieron en uno de los símbolos de los crímenes de guerra cometidos por los ocupantes rusos. Los invasores torturaron y asesinaron cruelmente a civiles y dispararon contra los automóviles de las personas que intentaban evacuarse.

Fotografiando los extraños patrones del metal quemado en los coches, Petro nos sugiere que reflexionemos sobre cómo afecta el tiempo a nuestra percepción de la realidad.

Yo soy de Járkiv. Me dedico a la fotografía desde la infancia y solo durante la invasión a gran escala (como siempre ocurre en tiempos de cambio) sentí que la noción de la realidad no está relacionada tanto con dónde podemos encontrarla, sino con cómo la vemos. Y este ilimitado espacio de la realidad, que surge a través de lo que vemos y cómo lo vemos, es muy importante para mí.

El lenguaje se convierte en el principal vínculo entre el mundo y el fotógrafo. No solo es capaz de destacar y concretar, sino también crear la realidad. Pensé que debe ser un mundo sin memoria ni tiempo. Y me imaginé un lenguaje sin tiempo pasado ni futuro. Sin sustantivos, adjetivos, etc. Solo verbos. Y me di cuenta de que aquí, en Bucha, dado con este lugar sin palabras.

Las fotos de los vehículos destrozados, quemados y fusilados de diferentes partes de la desocupada ciudad de Bucha son un símbolo de la ausencia de palabras y, por tanto, de la ausencia de memoria. Se trata de una textura que ya está más allá del lenguaje, más allá de la historia: solo formas fijas. Despersonalizados, son los últimos testigos del destino de las personas y ahora solo pueden encender la tristeza, la desesperación y el odio.

Es curioso volver a las recopilaciones que has hecho antes y ver algo nuevo en ellas. Podías haberlas tomado como si estuvieras ebrio, sin entender el significado de lo que hacías, y luego encontrar en ellos sobre lo que estabas hablando. Es como sacar algunas frases o ideas del diario y escribir un libro partiendo de ellas.

Qué increíble efecto tiene el tiempo en las fotografías y qué diferentes las vemos al día siguiente de tomarlas, medio año después y un año después de la desocupación de Bucha. Recuerdo haber pensado en la fábrica de la guerra, en la muerte que salía como producto de esta fábrica. Es similar en cuanto al principio de la creación, pero muy individual y trágica. Podía oír a los únicos testigos de la muerte que permanecían en silencio, y pensaba en lo fríos que eran — esas formas fijas que habían cercenado el tiempo.

“Has sido tú quien ha convertido a la humanidad en plomo y hierro, quien, a través del ruido de las carreteras del este, respira para siempre con muerte y dolor. Es por tu culpa que no llegan a los ataúdes. Tú rasgas el silencio del cielo sereno con cañones, con colas de fusilamientos, contaminas el aire con polvo y humo, ruges y gritas de dolor, de alegría, de ira. Eres como un animal, cruel”. (De los diarios del 27.08.2022)

El material ha sido preparado por

Fundador de Ukraїner:

Bogdán Logvynenko

Autor,

Fotos:

Petro Chekal

Jefa de redacción en ucraniano:

Anna Yabluchna

Editorial:

Natalia Ponedílok

Editor de fotos:

Yurii Stefanyak

Administradora de contenido:

Yana Rusyna

Traducción:

Sabina Larina

Edición de la traducción:

Yulia Marchylo

Jefa de redacción en español:

Svitlana Kazakova

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